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Desde mi escaño

¿Erupción inminente en Tenerife?

¿Erupción inminente en Tenerife?

El diario británico sensacionalista The Sun publicó hace unas fechas una noticia un tanto inquietante sobre una inminente erupción volcánica en la isla de Tenerife, dato éste que, sin lugar a dudas, no produce tranquilidad ni para los visitantes, especialmente los del Reino Unido, ni para los empresarios del turismo en la isla, que pueden ver aun más mermados sus ingresos, que de por sí ya están bastante escuálidos, pero que ante una información de estas características el riesgo de seguir perdiendo clientes sería más que real. No obstante, en descargo del rotativo, los datos que aporta no los ha sacado por ciencia infusa, sino que la responsable de emitir este juicio ha sido una investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Alicia García, que aseguró a The Sun que "existe preocupación entre la comunidad científica por la situación de la isla de Tenerife debido a la actividad sismovolcánica y su vulnerabilidad ante una posible erupción explosiva". La investigadora recalcó que la Caldera de las Cañadas constituye hoy por hoy una gran preocupación para los investigadores que trabajan en Canarias y reconoció que "no pinta muy bien la situación del sistema del Teide y Pico Viejo".

Hasta aquí, los datos objetivos, las declaraciones o el extracto de la conferencia de la que se ha hecho eco el periódico británico. Sin embargo, el investigador de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Francisco Pérez Torrado pide "que se pongan de una vez de acuerdo los geofísicos y que nos definan bien cómo es el sistema magmático alimentador del Teide, y que no estén lanzando mensajes contradictorios, porque, tan pronto el Teide va a reventar en 2004, como luego nos olvidamos". Y tiene toda la razón. No se puede estar con esta serie de noticias que, de no estar plenamente contrastadas, sólo provocan un daño irremediable a quienes tienen que sufrirlas. Por un lado, los potenciales visitantes a los que se les ofrece una imagen de una isla inestabilidad, que en cualquier momento puede partirse en dos y que no hay un protocolo de evacuación. Por el otro, repito, los hoteleros y propietarios de locales de ocio y restauración, a los que se les genera un perjuicio económico de padre y muy señor mío. Ante todo, ya que consideramos a nuestros científicos con un mínimo de seriedad y rigurosidad, que se apliquen el cuento y que no nos tengan en ascuas y en debates abstractos que ellos solos parecen comprender.

No obstante, dejando claro que quien suscribe el artículo sólo tiene mínimas nociones de geología, las aprendidas en la diplomatura de Geografía e Historia, en la Universidad de La Laguna (1992/1995), suscribo totalmente las palabras del geofísico Ramón Ortiz Ramis y su colaborador en el departamento de Volcanología del Museo Nacional de Ciencias Naturales, Vicente Araña Saavedra, en las que señalan textualmente que "todo el trabajo realizado, petrológico, geoquímica de fluidos, geofísica, etc., indica la ausencia de cámaras magmáticas en condiciones de producir erupciones de carácter explosivo en un volcán central, el Teide. Los riesgos son magnificados por los medios de comunicación y grupos de pocos escrúpulos que piensan que exagerando el peligro pueden obtener mayor financiación y promoción".

Menos mal que todavía hay quienes huyen de estos discursos proféticos, cargados de apología del terror y del sensacionalismo y apuestan por Tenerife (o por el resto de las islas Canarias) como un lugar paradisíaco, pero ya no sólo para pasar unos días de vacaciones, nada de eso. Quienes en estos días hemos tenido la oportunidad de subir al Parque Nacional del Teide hemos visto como se trabaja a destajo para montar varios escenarios del remake de la película Furia de Titanes. Con todo esto, tengo la sensación de que en Hollywood, la meca del cine por excelencia del mundo occidental, tienen más luces (y focos) que cuatro británicos de barriga cervecera y que saben sacar jugo a unas declaraciones de una científica que, sin ponerla en tela de juicio, seguramente les ha hecho el juego para vender unos miles de periódicos más y beneficiar a otros destinos competidores con el canario.

1 comentario

Lewis Rogers -

La casta científica tiene su propia jerga y tal como están las cosas hoy en día con la crisis económica conviene que no se olviden de ellos nunca, porque las subvenciones son su vida y sin ellas, mueren. Los informes polémicos están a la orden del día y de una semana a otra nos encontramos con que nos hemos cargado el planeta, los mares están casi muertos, los hielos de los polos se descongelan a pasos agigantados, el CO2, los efectos invernadero... Del Teide hacía tiempo que no se hablaba y si se dice algo, mejor que sea para mal, porque la mala noticia es la que vende, la otra ya la sabe todo el mundo. Cada vez son más los apocalípticos que aterrizan cerca de nuestras vidas y cómo es obvia nunca nos vienen con buenas nuevas. Es indudable que si un día cualquier volcán del mundo reúne las condiciones para una erupción, ésta tendra lugar. Pero, encima, tener que soportar a los agoreros, hace el asunto insufrible. Por favor, déjennos tranquilos.