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Desde mi escaño

La Policía no tuitea...pero vigila

La Policía no tuitea...pero vigila

El insulto en las redes sociales se ha institucionalizado como moneda de uso común. Demasiados internautas desconocen una fundamental regla de oro, que estamos más vigilados de lo que nos podemos creer, aunque usemos seudónimos o identidades falsas. Tarde o temprano se acaba descubriendo el pastel y las consecuencias pueden ser desde el bloqueo de la cuenta a terminar declarando en comisaría y luego siendo juzgado ante un tribunal por amenazas de muerte o por intromisión en la imagen y en el honor de una persona.

Sin embargo, insisto, muchos usuarios de Internet no aprenden esa norma esencial del buen comportamiento y además actúan de una manera muy peculiar. Por ejemplo, dan por hecho que se puede insultar y vejar a una periodista como la presentadora de Los Desayunos de TVE, la señora Ana Pastor. Hace tan solo unos días, con motivo de la huelga general del 29 de marzo de 2012, un tipo que no tenía mejor cosa que hacer le plantó un twitter donde le preguntaba lo siguiente ¿Qué, hoy no trabajas, zorra? Obviamente, la compañera del ente público capturó el comentario e hizo la pertinente denuncia al twitter de la Policía Nacional @policia, cuenta que sirve para perseguir a esos elementos que pululan por la red en busca de vaya a saber usted qué clase de protagonismo.

Pero como le pasó a Ana Pastor, todos los días tenemos movidas de éstas. Se ha insultado a Eva Hache, a Hermann Tertsch, a Frederic Hermel, a Juanma Castaño y todo por el único criterio de que como es gente famosa han de dar por hecho que se les puede insultar, como si Twitter fuese un campo de fútbol donde sueltas todas las burradas imaginables y las que no lo son contra los jugadores del equipo rival.

Afortunadamente, repito, poco a poco nos vamos concienciando de que Twitter o cualquier red social está sujeta a unas mínimas normas de convivencia y que quien no sepa adaptarse debe ser inmediatamente expulsado de ese foro, por las buenas o por las malas. Por eso, nunca se ha celebrado más que los gestores de @policia estén llevando a cabo un trabajo tan exquisito y donde se deje claro que no se va a dejar ni medio milímetro para el acoso, la vejación o el insulto. Eso sí, a veces a la Policía se lo ponen tan sencillo como el tipo que insultó a Pastor y su perfil era, pásmense ustedes, el de una empresa de neones de Valencia. Creo que, a día de hoy, si él era empleado de la compañía le habrán puesto de patitas en la calle. Y es que, aparte de insultador…era un tremendo idiota (con perdón).

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