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Desde mi escaño

Ridículo 'toledano'

Ridículo 'toledano'

Pobre Willy Toledo. Su carrera como actor está más estancada que una charca en pleno desierto del Gobi y ello le ha llevado a desarrollar otra serie de papeles por los que tampoco conseguirá, precisamente, ni el Goya ni el Oscar a la representación más patética o dramática. El problema para este artista es que ha interpretado en los últimos años tantos roles que ya ha perdido el oremus, el contacto con la realidad y lo único que está haciendo es completar el más absoluto de los ridículos. Se ha metido con los propios, con los extraños, con los amigos, con los enemigos y con quien se ponga por delante a cambio de tener esos minutos de gloria que a él tanto le gustan. Así va Guillermito por la vida.

El caso es que nuestro actor, después de ser zejatero, prosaharaui, indignado a tiempo parcial o sindicalista de UGT-CCOO, ahora se suma a la lucha obrera del clan Sánchez-Gordillo, ese alcalde de Marinaleda, diputado de IU y miembro del sindicato SAT cuya manera de arreglar las cosas es asaltando supermercados u ocupando fincas y propiedades que, a su juicio, son fruto del malévolo capitalismo. El señor Toledo, aburrido que debía de estar, se unió al grupete del caballero del pañuelo palestino y sin que nadie le dijera nada, allá que se puso a la cabeza de la pancarta. Eso sí, la vocación le durará justo el mismo tiempo que los organizadores de estas marchas le hagan de menos o directamente le pongan en el AVE rumbo a Madrid.

No sé si Toledo busca que Pedro Almodóvar le reclute o le rescate del anonimato para hacer una adaptación de Mujeres al borde de un ataque de nervios, pero en versión masculina, donde podría perfectamente compartir escenario con Javier Bardem o Juan Diego, otros expertos ‘analistas’ de la realidad española a pie de calle y doctores honoris causa tras su tesis ‘La pancarta, el pañuelo palestino y mis subvenciones…ni tocarlas’. Pero lo que está claro es que alguien tiene que decirle claramente a este actor que debe dejar de hacer el ridículo, más que nada por su propio (aunque escaso) prestigio. Y es que el miembro de Animalario y actor estelar en ‘El otro lado de la cama’ ha pasado a interpretar ‘En lo profundo del fango’, una ópera bufa que pretende ser transgresora, pero que no provoca más que la hilaridad entre los asistentes.

1 comentario

Maria Hernandez -

Ya dice el refrán que cuando el diablo se aburre mata moscas con el rabo. Pues eso, si no hay proyectos cinematográficos a la vista pues en algo hay que matar el rato. 
Y es que son muchos burros para pocos pesebres. Todo el mundo quiere ser actor y salir en la tele, pero no se puede llenar la programación de series y películas que no solo no entretienen, sino que aburren.
Solo se puede hacer a base de subvenciones "zejateras" ( que ingenioso).
Y bueno, así no se consigue no ya el Óscar o el Goya, ni tan siquiera el Razzi.

Muy ingenioso también "en lo profundo del fango" muy apropiado.

@MMariaHs