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Desde mi escaño

Dos frikis muy tontos

Dos frikis muy tontos

Los gañanes de la semana han sido dos agentes de la policía local de Cerdanyola que, en un acto de auténtica tontería supina, no tuvieron mejor ocurrencia que grabarse un video haciendo el idiota dentro del coche y en horas de servicio. La astracanada audiovisual llego a Youtube por pura venganza sentimental y a partir de ahí se desata la tormenta perfecta.

Y es que, reconozcámoslo, todos los que hemos visto el video, ya casi quitado de muchos canales de Youtube, hemos tenido el mismo pensamiento, ¿sirve para algo tener tantos cuerpos policiales? Sí estos dos personajes sin fundamento han tenido tiempo de sobra para grabarse haciendo el friki, eso quiere decir que no habrá tanto que hacer en esa localidad, que tal vez con un sereno nos basta y nos sobra. Pero no, aquí hay que tener hasta policía de proximidad y hasta de acera si nos ponemos imaginativos o creativos…ya puestos, ¿no?

Lo de que el vídeo haya llegado a la red no sólo es porque la mujer de uno de ellos haya optado por vengarse vilmente, sino que nunca habría ocurrido el hecho de no haberse grabado, algo así como lo que pasó con la señora Hormigos, les suena, ¿verdad? Al final aquí parece que el pecado no es tanto haberse grabado haciendo el bobo (por decirlo finamente) en horas y en lugares donde uno debería estar cumpliendo escrupulosamente con su labor, la de vigilar las calles, sino que quien va a quedar como la mala de la película (bueno, en el fondo lo es un poquito) es la señora de uno de estos dos agentes que decidió solventar unas discrepancias familiares a golpe de Youtube.

Pero, insisto, creo que este capítulo nos viene muy bien a todos para ponernos en situación y elevar esta anécdota a categoría de hecho general. Es el momento de ver todo lo que está de más en España, el desastre que han supuesto las autonomías y que tengamos ayuntamientos que a veces están menos poblados que un bloque de vecinos. Nadie dice que se deje desguarnecido un núcleo, pero lo que tampoco es de recibo es que se monten comisarías de policía en cada esquina como si toda España fuese Canción Triste de Hill Street. Hay que saber distinguir.

1 comentario

Maria Hernandez -

Todo el mundo tiene el derecho, y también el deber, al pataleo. 
Lo que han equivocado es la forma.
Esta claro que profesionales de su trabajo no son. Pero tampoco se les puede culpar porque continuamente se pueden ver ejemplos peores en sus jefes, los políticos.
Pero desde luego para estar manteniendo, entre todos, a funcionarios así, mejor contratar a los de La loca Academia de Policía, al menos se pasaría un rato divertido, porque graciosos, precisamente, no son los muchachos.

@MMariaHs