Blogia
Desde mi escaño

El certificado de Lorca: un túmulo demasiado maloliente

El certificado de Lorca: un túmulo demasiado maloliente

¡Atención, atención, bomba informativa, que a Federico García Lorca lo han matado los franquistas! Sí, esta es nuestra España, un país que como no tiene problemas, se dedica a sacar de lo más profundo del basurero lo que ya estaba enterrado y más que enterrado. Pero, vamos a ver, ¿acaso era necesario recordarnos que el escritor fue pasado a disparo limpio por las huestes del Generalísimo? Pues si eso ya lo sabíamos, pero no de ahora, sino de hace ya algunas cuantas décadas.

Desde que Zapatero llegó al poder, en España se ha abierto la Caja de Pandora del resentimiento, del revanchismo y del enfrentamiento por cuestiones meramente políticas y lo peor es que, lejos de cicatrizar las heridas, se están reabriendo y cuatro aprovechados se están dedicando a lucrarse cuales Indiana Jones a buscar tumbas para ver si encuentran la del escritor o la de cualquier otro rojo. Porque, claro está, a estos restauradores y revisionistas de la historia no les interesa tener todas las partes o todos los puntos de vista, sino el que a ellos les viene de perilla para seguir vendiendo su humo falaz.

Ahora muchos medios están comprando la noticia de ese certificado de defunción en la que se especifica quienes estuvieron detrás de la muerte de Federico García Lorca y los motivos por los que fue asesinado, por socialista, masón y homosexual (algo que, dicho de paso, ya era conocido) pero, curiosamente, no se concreta donde está enterrado el cadáver o, mejor dicho, los restos que deben quedar de él.

Puestos a ser revisionistas de la historia, ¿por qué no nos dedicamos a buscar las partidas de defunción de todos los curas pasados a cuchillo por los rojos o quemados dentro de sus iglesias o todos aquellos civiles que fueron aniquilados en las checas por la única razón de pensar diferente? Aquí, hace ya más de 36 años, los españoles nos dimos una Constitución y una reconciliación nacional donde ya no había ni vencedores ni vencidos. ¿A cuento de qué viene ahora sacar a colación esta porquería de cadáveres putrefactos, se llamen Lorca o Perico el de los Palotes?

0 comentarios