El chulo putas de Alfonso Basterra y la plañidera falsaria de Rosario Porto

El chulo putas y la falsaria plañidera. Así son y así se comportan Alfonso Basterra y Rosario Porto, los padres adoptivos y presuntos asesinos de la niña Asunta Basterra, durante las dos primeras jornadas del juicio que está teniendo lugar en Santiago de Compostela dos años después de que se produjera el dantesco crimen.

Estos dos sujetos infectos se han creído que la policía y que, especialmente, juez y jurado son tontos de nacimiento y se están dedicando a tejer una estrategia basada en hacerse la loca rota por el dolor de la muerte de la pequeña, en el caso de la madre, y el chuleta desahogado, tipo portero de discoteca en el caso del padre. Un par de sinvergüenzas que creen que están en una especie de juego virtual, dos elementos que deberían estar borrados del mapa, pero la lotería genética tiene estas cosas y al final lograron nacer y vivir como dos siniestras cucarachas a las cuales no hay nadie que las pisotee como mandan los cánones.

Alfonso y Rosario son dos perfectos actores del método a los que no haría no falta abogados que les defiendan. Ya tiene pactada y diseñada la estrategia a seguir y no hay empacho alguno en embarrar en terreno de juego judicial metiendo de por medio al pederasta de Ciudad Lineal. De milagro no metieron también en el ajo a José Bretón o a Miguel Carcaño. Por inventar y crear confusión, que no quede.

Pero seguro que al final la verdad saldrá adelante y a este matrimonio de conveniencia les espera largos años a la sombra. Una cuerda les daba yo, como la que usaron con Asunta, para que la empleen como mejor consideren, aunque entiendo que lo más adecuado es atarla a un barrote, subirse a una silla y dar un pequeño salto al vacío. Lo demás, queda en la imaginación colectiva.