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Desde mi escaño

Pablo Iglesias: ante un 'Monedero' sin perras recurre al crowfunding

Pablo Iglesias: ante un 'Monedero' sin perras recurre al crowfunding

España, hay que reconocerlo, es un país que se mueve con asombrosa rapidez cuando se trata de apoyar una causa solidaria. Salvemos a las ballenas, a las focas de la Antártida, protejamos los bosques caducifolios del Mediterráneo occidental, preservemos la ardilla de pino carrasco, adhiérase a la causa para que Andrea tenga su silla de ruedas reuniendo un millón de tapones de plástico. Todos estos casos, en el caso de ser ciertos, provocarían que rápidamente nos sumásemos porque hay detrás una motivación social o ecológica. Sin embargo, alguno cree que ‘Puede’ torcer de manera torticera el gran corazón de los españoles hacia historias que nada tienen que ver con la solidaridad y ‘Podemos’ demostrarlo.

Por ejemplo, el líder de esta formación chavista y elogiosa con la banda terrorista ETA, el señor Pablo Iglesias, eurodiputado de nuevo cuño, debe ser que aún no ha cobrado sus primeros emolumentos de Bruselas y ha solicitado a sus camaradas y simpatizantes varios que le hagan una colecta (no una coleta, que de eso ya va sobrado) o llamada pomposamente crowfunding para meterle una demanda a Esperanza Aguirre, Eduardo Inda y Alfonso Rojo. Independientemente de que los argumentos esgrimidos para llevar a esas personas a los juzgados se sostienen menos que un castillo de naipes en medio de una tormenta en el desierto, lo cierto es que Iglesias, aparte de chavista, es un cutre de mucho cuidado porque una demanda de conciliación no sale más allá de 600 euros de vellón y el sujeto en cuestión ha sacado más de 12.000 euracos. ¿Qué va a hacer con el restante? ¿Lo donará a las víctimas de ETA? Lo dudo.

Insisto en que a veces los españoles nos pasamos de solidarios y apoyamos cualquier causa por muy absurda que pueda ser ésta y la del señor del Podemos lo es en grado supino y superlativo. Si tiene ganas de poner una demanda, póngala, pero jugándose sus cuartos, no la de unas personas que, con su mejor voluntad, han aportado una media de 15 euros, desconociendo, eso sí, los verdaderos pensamientos de su líder y que, según las informaciones que manejan los medios de comunicación, dispone de suculentas fuentes de ingresos, entre ellas la del Parlamento Europeo. Lo cachondo e irónico del caso es que esta formación recurra al crowfunding teniendo a un Monedero en sus filas. El problema es que a lo mejor ese ‘monedero’ está tan vacío por dentro como la estéril ideología y pensamiento de su propietario.

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