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Desde mi escaño

Piqué, quien siembra vientos separatistas recoge tempestades españolas

Dice un sabio refrán español que quien siembra vientos recoge tempestades. En el caso del jugador del Fútbol Club Barcelona Gerard Piqué al dicho habría que añadirle que quien siembra vientos independentistas recoge tempestades españolas. Tantos años dándole patadas por debajo de la mesa a todo lo que representa España que, claro, cuando ya decides, por cuestión de comodidad, recortarte las mangas, alguien puede pensar que lo has hecho, precisamente, por tapar un símbolo español. Craso error, sin duda, por parte de algunos periodistas en televisión, en radios, en Twitter y también por parte del exsecretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez.

Tal y como quedó acreditado, Piqué no cercenó signo alguno que pudiera hacer desaparecer de la camiseta cualquier referencia a España. Insisto, lo hizo por una cuestión de comodidad y, entre otras cosas, habría que destacar que en los últimos tiempos el barcelonista se había mantenido alejado de polémicas sobre el Real Madrid o hablar de la caverna mediática y hasta su compromiso con la Selección había mejorado de manera sensible.

Pero claro, lo de los ataques a Piqué, injustificados en el caso del partido ante Albania, vienen de lejos y porque él se encargó de hacerlos crecer y fortalecer. A un jugador del Madrid le espetó hace ya algún tiempo una frase del tipo “¡quedaos con vuestra España!”, ha llevado a su hijo a marchas separatistas en Barcelona, ha atacado al Real Madrid y a los periodistas de la capital de España como si fuesen poco menos que la encarnación del diablo. Se queja Piqué de que ha tenido que aguantar mucho, insultos varios en redes sociales, y quien suscribe este artículo reconoce haber tenido alguna frase de más pasada vuelta contra el futbolista. Pero claro, esto es lo de siempre, uno puede permitirse atacar a España, pero los demás deben quedarse callados, ¿no?

Por eso, le aconsejo al excelente defensa central del Barcelona que si no se siente a gusto yendo con España, que no vaya más, que no sufra y que no espera hasta el Mundial de 2018. Porque, entre otras razones, después de ese anuncio de que dejará la Selección tras disputarse la gran cita balompédica en Rusia, cualquier error en el campo puede malinterpretarse. Si se ha hecho con la polémica de la camiseta, imagínense que hace una ‘bufonada’ al estilo del guardameta de la selección de Italia y por su culpa España acaba eliminada. No quiero ni pensar la que le caería encima.

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