Guigou y el empute de CC
Guillermo Guigou, finalmente, se presenta al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Prácticamente sobre la campana, todo hay que decirlo, pero Ciudadanos de Santa Cruz volverá a estar a disposición de los chicharreros como una alternativa al clásico trío de nacionalistas-coalicioneros, populares y socialistas. Una vez más, aunque no quiero pecar ni mucho menos de petulante, podría haber reventado el plan que tenía en mente el líder de este partido, pero, atendiendo a esa premisa básica del secreto profesional y de respetar las confidencias, opté por mantenerme en silencio hasta que se produjese la noticia, algo que sucedió ayer lunes por la tarde. La alegría de muchos simpatizantes de esta fuerza contrastó, curiosamente, con el cabreo de algún periodista y, sobre todo, de algún miembro de Coalición Canaria con cierto peso en su organización.
El líder de Ciudadanos de Santa Cruz tenía claro que presentarse a los comicios del 22 de mayo suponía un duro varapalo a los bolsillos de la formación. Guigou, algo extraño en un político, entendía que endeudarse sin haber pagado del todo el crédito de 2007 resultaba un suicidio en toda regla y por eso la decisión más lógica, aun a sabiendas de que se quedaba huérfana una parte del electorado capitalino, era la de no concurrir a las urnas y esperar a solventar las apreturas económicas que ahogan a un partido de las pequeñas dimensiones de Ciudadanos.
Sin embargo, como en Navidad, siempre llega el milagro y, gracias a una acción puntual, Guillermo Guigou será cabeza de lista de cara a la cita de mayo, hecho que parece haber sentado rematadamente mal en el seno de Coalición Canaria porque, salvo que uno esté equivocado, Daniel Cerdán Elcid es uno de los elementos clave en la maquinaria nacionalista, uno de los asesores esenciales del malogrado Adán Martín Menis y hasta director de la Radiotelevisión Canaria. Concretamente, Cerdán, en la tertulia de El Frangollo, en Mírame Televisión, dijo que Ciudadanos era un partido de juguete, sin estructura sólida y al que le faltaba criterio, tal y como se había visto con esta indecisión de me presento-no me presento-me presento.
Hay una parte que es verdad, la formación de Guigou no podrá estar a la altura de Coalición Canaria, pero por un aspecto básico. Los nacionalistas, especialmente en Tenerife, La Palma, El Hierro o Fuerteventura, tienen la posibilidad de tocar mucha cuota de poder. Entrar en las instituciones supone una fuente esencial para los partidos y, sin que nadie lo malinterprete (que nos conocemos), ahí tenemos el caso de las marcas electorales que apoyan a ETA y que están fritas por entrar en las instituciones vascas, porque eso revierte económicamente en la organización. Ciudadanos, con dos concejales que sacó en 2007, no puede hacer frente, ni mucho menos, a los cuantiosos gastos derivados de su campaña. En cambio, CC amortiza rápidamente el dinero invertido.
Lo importante, lo realmente interesante, es que Ciudadanos concurrirá a las elecciones municipales y, dado el hartazgo de muchos santacruceros ante la pervivencia de un modelo que se ha revelado completamente agotado, puede tener un peso decisivo tras el recuento de los votos. Dado como está montado el invento electoral, no nos engañemos, Guigou no ganará las elecciones, pero sí que le pronostico un ascenso importante en el número de sufragios y, sobre todo, en los concejales que pueda sentar en el salón de plenos. Considero que su papel puede ser clave en la gobernabilidad de esta capital canaria que, lamentablemente, se ha acostumbrado a ser noticia por hechos nada decorosos en los últimos años.
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Máximo Medina -