El señor Clemente (con perdón por lo de señor)
El Sporting de Gijón, aunque sólo fuese por una cuestión de higiene, debería poner en la cola del paro a Javier Clemente. El de Baracaldo no sólo se ha pasado cuatro pueblos, sino que ha manchado la imagen de la entidad rojiblanca, un club, dicho sea de paso que a estas horas aún no se ha pronunciado sobre los insultos de su técnico al periodista Juan Gancedo, vinculado a Onda Cero y a La Voz de Asturias. Y todo porque éste tuvo la ’osadía de escribir en su Twitter que los planteamientos del entrenador del Gijón eran caducos.
Más que definirles en esta ocasión cómo fue el diálogo, juzguen por ustedes mismos:
J. Clemente: "Algún día le diremos a su hijo lo que usted es"
J. Gancedo: "Me está ofendiendo personalmente"
J. Clemente: "No"
J. Gancedo: "Yo he hecho una crítica sobre sus métodos. Nada más y me está ofendiendo personalmente"
J. Clemente: "No señor"
J. Gancedo: "Usted está como una auténtica regadera, perdone que se lo diga. ¿A usted le parece normal después de cómo está el equipo sentarse ahí y hablar de mi hijo y que le va a decir a mi hijo cómo es o no es su padre? ¿Usted está bien de la cabeza?"
J. Clemente: "Claro que estoy bien"
J. Gancedo: "Abandono la sala de prensa simplemente porque me ha faltado al respeto personal"
J. Clemente: "¿A ti?"
J. Gancedo: "A mí ¡Qué le vaya muy bien señor Clemente!"
J. Clemente: "A tú hijo le diremos lo que es su padre, que es un sinvergüenza. ¿Entiendes? Usted es un sinvergüenza, un maleducado y encima es más tonto que un saco de habas. Usted no entiende nada. Escribe en la twitter. A mí me da la sensación de que este chico está un poco enfermo. Es peligroso. Un enfermo escribiendo yo creo que debería ir a que le vea el médico o algo. No sé, me da a mí la sensación que le deberían hacer un análisis o un chequeo porque no entiende las conclusiones, lo que escribe. Se tiene que mirar la cabeza. Este chico está muy mal".
Creo que después de este chaparrón de despropósitos del señor Clemente (perdón por lo de señor), la entidad asturiana sigue tardando en poner al vasco en la calle, pero bueno, esas son cosas de Vega Arango y su extraña forma de concebir el fútbol, exactamente la misma que le llevó a echar a Manuel Preciado para ponerse en manos de la gran estafa de los últimos años del fútbol español que, salvo en su última estancia en el Bilbao, ha descendido a Tenerife, Valladolid, va rumbo de hacerlo con el Gijón, ha hecho el ridículo con las selecciones de Serbia y Camerún, amén de la espantada con Irán. Y es que Clemente tiene que darse cuenta que no se puede vivir de dos Ligas, una Copa, una final perdida de la UEFA y los ’casi los eliminamos a italianos e ingleses’ del Mundial 94 y de la Eurocopa 96".
1 comentario
Anónima -
Si empiezo con esta frase, ¿verdad que lo primero que despierto en ti no es más que odio, repulsa, o simple incomprensión?
¿Por qué no reproduces toda la conversación, o adjuntas un link al vídeo con la conversación completa? Ah no, que no interesa. Es más fácil despotricar y decir paparruchadas, ir de neocínico liberal, y hacer como que todo nos parece mal
Sinceramente, ví toda la conversación, y me parece extremista; porque aunque usó unas frases inacertadas, realmente este hombre no quería insultar a su hijo, es que ni siquiera tenía ningún papel relevante en esa conversación, a lo que se refería realmente era a que "algún día ya le dirían a él (o a su hijo si ya él estaba muy mayor) lo que era; quizás un hombre también de técnicas antiguas y obsoletas".
Que no estuvo acertado, por supuesto, pero tampoco es para que le crucifiquen. A nadie le gusta que critiquen su trabajo sin por lo menos antes haberse cerciorado de que lo que dice es cierto, y haberse informado un poquito sobre el tema.
Ya está bien de ir por la vida diciendo tonterías, que en estos tiempos que corren, eres lo peor de lo peor si dices las cosas a la cara, o si las dices tal cual las sientes. Luego nos echamos las manos a la cabeza si detienen a los padres por darles un cachete a sus hijos cuando están portándose mal, o como aquel que detuvieron por arrestar sin salir de casa a su hija.
Y todo esto por poner un simple ejemplo, porque desde mi más sincero pensamiento, no defiendo a Clemente, nunca me ha interesado ni su equipo, ni su persona, ni tan si quiera el deporte practicado, pero una se harta de oír a "periodistas" (que se supone que deberían de ser algo más experimentados, y por lo tanto más imparciales) poner el grito en el cielo por un intercambio de palabras desacertadas.