Ojalá el 25 de noviembre de 2014 tengamos cero muertes por violencia de género

Hoy, 25 de noviembre de 2013, ha tenido lugar una nueva jornada de celebración del Día Internacional para luchar contra la violencia de género, pero ¿qué se está haciendo al respecto para que resulte efectivo? Las cifras cantan y, sólo en lo que respecta a España, decenas de mujeres mueren a manos de sus parejas, pero más allá de los datos de asesinatos, lo más preocupante es que ignoramos ese tipo de violencia que a veces no llega a los juzgados, ni siquiera se queda en mera denuncia, ya sea por desconocimiento, por vergüenza o por el motivo que ustedes quieran poner.

El caso es que el pasado fin de semana, en un periódico nacional, El Mundo, venía un reportaje que te ponía los pelos como escarpias sobre como un chico se dedicó a acosar a su ex pareja durante cerca de 22 horas seguidas a través de mensajes y llamadas de whatsaap. El tipo, que además no debía ser demasiado inteligente, se dedicó a enviar los textos desde otro número, pero dando los datos necesarios para que quien fuese su compañera sentimental supiese de quien se trataba el individuo en cuestión. Obviamente, no sólo lo ha puesto en conocimiento de un medio en concreto, sino que también ya se ha cursado la pertinente denuncia para poner a este tipo donde se merece.

Sin embargo, el caso de esta mujer no deja de ser una mera excepción. Hay constancia probada de que muchas parejas se mantienen unidas a pesar de que una de las partes (normalmente la masculina) suele hace un uso, abuso y control férreo de lo que hace la otra persona. Todo es una vigilancia atroz de lo que cuelga en redes sociales, de los amigos que agrega y poco a poco empieza un chantaje emocional que puede desembocar, precisamente, en lo que le sucedió a esa pobre chica sufriendo un agobiante torrente de mensajes a cual más delictivo durante 22 horas. El problema es que hay quien entiende, además desde ambas orillas, que ese acoso no tiene recorrido en los juzgados, pero afortunadamente la legislación se está poniendo al día y estos casos de violencia de género tecnológica ya se contemplan como delito y que acarrea pena de cárcel, amén de las indemnizaciones pertinentes.

Ojalá y podamos celebrar el 25 de noviembre de 2014 un Día Internacional contra la violencia de género sin muertes. En este 2013, desgraciadamente, ya sobrepasamos las 60 y, ojalá me equivoque, pero me temo que de aquí a fin de año tendremos que lamentar algún fallecimiento más.