Talegón: En boca cerrada no entran moscas...ni croquetas
Beatriz Talegón ha demostrado que es cualquier cosa, menos una política inteligente. Su patético numerito montado hace unos días en la televisión de Castilla-La Mancha, inquiriendo cual Torquemada lo que cobraban los tertulianos que iban al programa No nos moverán, dejó demostrado bien a las claras que ella no acudió a ser simplemente entrevistada. Acudió al plató como una comisaría política al estilo del comunismo del extinto Telón de Acero. Sólo le faltó llevar la recortada para liquidar in situ a todo aquel discrepante.
A la señora Talegón se le llevaban los demonios al saber que la media que cobraban los participantes en la tertulia que conduce Yolanda Guirado se elevaba a los 200 euros. Para ella, para esta socialista caviar, era intolerable que algunos periodistas como Alfonso Rojo cobrasen ese pastizal y que tendría que ser él quien pagase por asistir. A eso se le llama empezar con buen pie cualquier entrevista (modo ironía on).
Pues bien, a la señora Talegón habría que recordarle y refrescarle la memoria con datos en la mano. Esa misma televisión a la que ella define como oficina de colocación de amiguetes de Cospedal o despilfarradora del dinero de los castellano-manchegos es exactamente la misma que estando en manos de Bono y, especialmente de Barreda, políticos de auténtica pata negra socialista, pagaban la nada despreciable cantidad de 500 euros por cabeza, es decir, dos veces y media más que lo que se paga ahora por acudir a las tertulias.
En fin, Beatriz, que tu caso se cumple ese aserto de calladita estás más guapa
y además no te entran croquetas por la boca. Ya ves, dos por uno. Beneficios de mantenerse en silencio cuando lo que vas a decir es uno sólo una chorrada, sino que encima corres el riesgo de que te saquen las cuentas.
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