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Desde mi escaño

Jorge Javier Vázquez y su falta alarmante de humildad

Uno de los principios básicos en el ser humano debe ser la humildad y la capacidad para reconocer abiertamente los errores cometidos. Una postura así nos hace evolucionar como personas y como profesionales. Empeñarse en negar la realidad lo único que hace es que los demás nos vean como contumaces trabajadores que insisten en decir que hace un sol de justicia cuando son las dos de la mañana. Podemos pintar las cosas de colores maravillosos, pero al final, basta con rascar ligeramente la superficie para que la cara verdadera de las cosas salga a relucir y a resplandecer.

Todo esto va por Jorge Javier Vázquez y su cabezonería de no reconocer los hechos tal cual son. Si unos datos de audiencia te dictan que ‘Gran Hermano 17’ ha sido, con diferencia la peor edición de la historia en ‘share’, lo menos que puedes hacer es, o esconderte, o hacer autocrítica. Lo que no es admisible en modo alguno es lanzarle un reto o un órdago a tus superiores asegurando que la edición decimoctava del reality la vas a volver a presentar tú porque lo has hecho muy bien.

Pero, Jorge Javier, si hasta Mercedes Milá ha dicho que ha sido infumable y que si ella hubiera estado al frente del concurso se habría desplazado directamente a la casa de Guadalix de la Sierra a soltarle cuatro frescas a unos participantes que daban menos juego que un maniquí. La realidad es la que es, por mucho que te empeñes en enmascararla con bravatas y gritar a los cuatro vientos que eres el mejor.

Insisto, Jorge Javier, nadie te discute tus conocimientos sobre televisión y que sabes perfectamente lo que funciona y lo que no, pero hasta el mejor escriba echa un borrón y en tu caso concreto ya llevas alguno que otra. Pero ojo, que es normal. Tantos años en la élite no hay cuerpo ni espíritu que lo aguante. En todos los órdenes de la vida, el líder acaba cayendo porque esto funciona así. Nadie puede ser primero eternamente.

En todo caso, lo que puede generarse es una lucha encarnizada de tal modo que siempre te estés alternando con otro espacio de la competencia en el top 1. Si al líder no se le pudiera toser, las ligas de fútbol, por ejemplo, siempre las ganaría el mismo. Por eso siempre se dice que lo importante no es llegar, sino saber mantenerse y para ello la humildad resulta esencial, Jorge Javier.

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