La caspa... o los piojos llegan a Sálvame con Paz Padilla y Mónica Hoyos

Ya no saben qué hacer en ‘Sálvame’ (Telecinco) para enganchar audiencia. Sé de buena tinta que cuando llevas más de un década larga al frente del mismo programa y viendo cada día a los mismos tertulianos, al final las ideas se te tienen que acabar, que hay un momento en el que la mente entra en colapso y por mucho que busques y rebusques no das con la piedra filosofal que te saque del apuro.

Pero lo bueno que tienen en el programa de La Fábrica de la Tele es que pueden sacar una historia o un drama de cualquier bobada. La más mínima nadería o minucia puede darles para montar una trama de conspiraciones y que acabe siendo motivo de un ‘polideluxe’ o bien que sirva para solventar una tarde. El caso es darle bien al magín, darle muchas vueltas a la cabeza y, en todo caso, acabar teniendo, aunque sea cogida por los pelos, una historia con la que tener entretenido al personal.

Y nunca mejor dicho eso de por los pelos, porque lo de los piojos de Mónica Hoyos es para enmarcar. Como los de ‘Sálvame’ se aburrían soberanamente y no encontraban una historia que llevarse a la boca, no se les ocurrió otra idea que la de pasar una prueba para ver cómo estaba la higiene capilar de los colaboradores. Por supuesto, ni que decir tiene que Paz Padilla recibió alborozada la propuesta y más aún cuando puedo cachondearse a mandíbula batiente de Mónica Hoyos por tener liendres.

Pero, vamos a ver, ¿creen que esto es serio? Así no se puede llenar una tarde, pero es igual, a ellos les sirvió para salir del paso, para solventar un vacío de contenidos y de paso para burlarse de una colaboradora a la que, sinceramente, si esto no se trata de un montaje, también le convendría hacérselo mirar…y lavar, entre otras razones porque no es una cría de seis años, ya es una mujer hecha y derecha como para descuidar algo tan esencial y evidente como el cuidado de su cabello.