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Desde mi escaño

Un engaño de risa...por no llorar

Un engaño de risa...por no llorar

Un engaño más, una sarta de mentiras sin despeinarse. Esto es lo que ha hecho el presidente del Desgobierno de España nada más aterrizar en Madrid tras pasar unas fantásticas vacaciones (a costa de todos) en la maravillosa Lanzarote. Los aires marineros y volcánicos de la isla de César Manrique le han proporcionado las fuerzas y las agallas suficientes para ponerse frente al atril de prensa del Palacio de la Moncloa y soltarnos a bocajarro que lo peor de la crisis ha pasado. ¿Perdón? preguntaría alguien incrédulo, ¿podría repetírmelo? Sí, como no, respondería con su talante sinigual el ínclito ZParo, que lo peor de la crisis ha pasado y no hay más preguntas, hombre ya, remacharía.

Sí, amigos y amigas (que diría la sin par y sinimpar Aído) esto casi es mejor para tomárselo a risa y a chacota (no confundir con Chacón) porque es que el jueves el ministro del paro (digo del Trabajo), Celestino Corbacho, anunció un otoño calentito en materia de destrucción de empleo, que todavía iban a venir mal dadas puesto que el fondo de los 8.000 millones de euros del Plan E (¡¡¡ehhhhhhhh!!! ¿dónde está mi acera que la acababan de poner nueva?) empezaban a estar casi agotados y, por tanto, el final de las contrataciones temporales también comenzaba a ser una triste realidad. Pero debe ser que ZP no escucha a sus ministros o que estos hablan un lenguaje poco inteligible para el inquilino monclovita. Ya pasó en tiempos de Pedro Solbes y cada vez que el entonces ministro de Economía llegaba con la tijera en mano, Zapatero rompía la hucha para repartir a manos llenas...hasta que se quedaba sin dinero y sin manos, evidentemente.

Pero el remate a su intervención cómica delante de la prensa la remató con una frase mendaz, digna de la propaganda más retorcida. Tratando de enmendar la plana a la señora Salgado, ZP avanzó que habrá una moderación fiscal. ¿Habrá algo más engañoso que hablar de una moderación impositiva? Es decir, quizá crea que aún hay personas que entiendan que el Gobierno no va a tocar los impuestos al alza. Nada más lejos de la realidad. Lo de la moderación es un modo fino de decirnos que los que cobran una renta más o menos apañada (y posiblemente estemos hablando de nóminas de 1.500 euros hacia arriba) tendrán que empezar a pagar más en cada ejercicio. Claro, así, evidentemente, entran más perras en la caja y por eso se puede hablar tan alegremente de que hemos pasado lo peor de la crisis. Pero eso son fuegos de artificio y además que son contrarios a una ideología, la defendida por Zapatero, que viene a decir que bajar los impuestos es de izquierdas. Pues, de momento, Aznar, siendo de derechas, no sólo no los mantuvo, sino que los bajó y salimos de la crisis por la puerta grande y nos metimos en el primer vagón de la Europa del Euro. ¿Su receta? Contención del gasto y congelación de los sueldos del funcionariado. A nadie le gustará que le tengan años y años sin subir la nómina, pero creo que es peor el dispendio y que cada año se incremente el desempleo.

1 comentario

Máximo Medina -

Zparo habla más de deseos que de realidades. Hace un año, ni había crisis. Luego, apretarse el cinturón y ahora... subida de impuestos. Y lo que haga falta, oiga. La gasolina nos la han ido subiendo casi sin darnos cuenta y es la principal fuente de ingresos del Estado. ¿Cómo se puede explicar que con el barril a 74 dólares el coste del repostaje sea el mismo que cuando el precio rondaba los 140 dólares? Simplemente, que ahora, estando más barato, el precio ha sido aumentado artificialmente, vía impuesto. Pero no es suficiente. El dispendio ha sido que es necesario seguir ordeñando la vaca. Los famosos 400 euros no declarables, los 2.500 por cada hijo y miles de subvenciones de todo tipo así como la financiación autonómica, han dejado las arcas públicas más vacías que el bolsillo de un trabajador a 28 de mes. La única solución, obviamente, es subir impuestos. La mejor manera sería reactivar la economía y mejorar el consumo, pero el Gobierno no puede obligar a los empresarios a contratar trabajadores y mucho menos animar al consumo, potestad, de perogrullo, del consumidor. Francia y Alemania salieron de la crisis apretando el consumo interior y aquí eso es imposible por la cantidad de parados que tenemos. Por cierto, Corbacho ayer me sorprendió. Dijo que el mercado laboral español no debe de ser tan rígido si en un año ha generado 1,3 millones de desempleados. Es cierto, pues en los países de nuestro entorno esta realidad no se ha dado. ¿Será por la facilidad que hay en España para despedir? Me temo que sí. Ahora, lo de ZP, de pena.