ZP y su doble vara de medir el respeto al menor
El presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, ha vuelto a quedar una vez más en evidencia. Esta vez se trata del asunto de las fotos e imágenes que se han difundido de sus hijas en una pose, conviene no olvidarlo, con el matrimonio Obama y el propio jefe del Ejecutivo español junto a su mujer. Es decir, estamos hablando de unos retratos consentidos y que, si tanto le han molestado, pues que hubiese dejado a sus niñas en Madrid y así no se habría producido ninguna polémica al respecto sobre la violación o no de los derechos de la intimidad del menor. Como señala en un artículo del ABC el periodista German Yanke, si uno va al núcleo donde se están tomando las decisiones más importantes para la economía mundial, ya sabe a lo que se expone y no creo, añado yo, que ZP fuese un ignorante sobre el particular.
Pero más allá de fotos y demás, lo que realmente me sorprende del presidente del Gobierno de España es su doble vara de medir a la hora de alzar la voz sobre el respeto que hay que tener con los menores de edad a la hora de preservar su intimidad y sus derechos. Mire, estoy totalmente de acuerdo con usted, pero si la norma se mantuviese siempre. Lo que no es de recibo es que por una parte se proteste formalmente y haya una regañina más o menos paternalista por el hecho de que se han difundido las fotos de sus hijas y, por el otro, muestre una cara muy diferente a la hora de dar cancha libre al aborto masivo. ¿Es que las niñas con 16 años, edad que tiene una de sus hijas, señor presidente, son sólo menores de edad para salir en las fotos, pero no para poder abortar?
Reza el viejo aserto que no sólo basta con predicar, sino también dar trigo y sus frases, sumamente idealistas, hablan de una sociedad muy tolerante, muy progresista...salvo cuando le toca a usted. No, en ese caso ya hay que poner todos los mecanismos necesarios para evitar sufrir los mismos males que el resto de la sociedad. Repito que a mí me parece muy bien que usted haya querido preservar la imagen de sus vástagas por ser menores de edad (algo que otros presidentes españoles no han hecho e incluso su amigo Obama nos presentó una y mil veces a sus niñas), pero aplíquese el cuento a la hora de dar esa vía libre al aborto y a la compra sin receta de la famosa pildorita. Si con 16 años se es menor, entiendo que también sucederá lo mismo a la hora de dar un paso tan trascendental como el de decidir si se sigue o no adelante con un embarazo. Una joven no puede tener las ideas claras sobre el particular y, posiblemente, tendrá que tener el asesoramiento de los padres para ver qué camino tomar.
Pero no, aquí nuestro presidente de mosquea por un asunto nimio como el de las fotos (¡y ojo! que no dejo de reconocer que cuantos menos datos se conozcan de la familia de un mandatario es mucho mejor para su seguridad), pero en cambio le importa un rábano que a partir de mañana empiecen a despacharse sin prescripción facultativa miles de píldoras abortivas o que las clínicas reciban la visita de menores de edad para que les cercenen la vida que empieza a gestar en su interior.
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Máximo Medina -