Moratinos desatinos
Las relaciones diplomáticas de España van de mal en peor. Zapatero ha conseguido que seamos el hazmerreír mundial gracias, entre otras razones, a que tenemos a un ministro que es incapaz de decir no a todos los encuentros con los sátrapas que campan alrededor del planeta. Miguel Ángel Moratinos ha sabido adoptar a la perfección el papel de tonto útil (o inútil) de las relaciones internacionales. Posiblemente, estamos hablando del personaje con menos actitudes para ostentar el cargo, pero se mantiene en el mismo porque ha conseguido hacer migas con lo más granado del lado oscuro. Lo del encuentro con el criminal ruandés Kagame (¡menuda cagada, dicho sea de paso!) es la guinda a nuestra agenda de relaciones con otros países.
Hace ya tiempo, de todas maneras, que las andanzas de Moratinos no sorprenden a nadie. El responsable de Asuntos Exteriores ha hecho de su departamento el negociado de las dictaduras de la Tierra. Sus innumerables viajes a Cuba siempre han tenido por objeto bailarle el agua a los hermanos Castro. Ni un solo gesto para los disidentes políticos, esos mismos a los que el actor Guillermo Toledo tildó de delincuentes comunes. La llegada de esos presos políticos a España no es, ni de lejos, un acierto de la gestión de Moratinos. Entre la labor de la Iglesia y de que los Castro querían quitarse a esas personas de ahí, lo demás era coser y cantar, pero, ya que vino el tonto útil hasta la isla caribeña, le endosamos unos cuantos presos de conciencia a nuestro amiguete Zapatero.
Por supuesto, seguimos haciendo el primo en otras naciones como Venezuela o Bolivia. Aquí, no hablamos ya de presos políticos, sino de que intereses españoles son pisoteados impunemente ante la pasividad moratiniana. Cualquier queja emitida por Curro Moratinos es inmediatamente aplacada por el Chávez o el Evo Morales de turno. Si nos expropian, que nos expropien, pero mejor no llevarse a mal con otros dos elementos de la alianza del mal, que son de los pocos ¿amigos? de los que podemos presumir a nivel internacional.
Esto, señores, es nuestra contribución a la diplomacia universal, unos ejemplos que, como ustedes comprenderán, deberían de estar urgentemente incluidos en una manual de Relaciones Internacionales, en el apartado de lo que no debe hacer una nación o en chapuzas y deslices varios. España tiene excelentes conocedores de la diplomacia internacional, Gustavo de Arístegui, por ejemplo, es uno de ellos, que ayudarán, cuando toque el momento, a recomponer nuestras maltrechas relaciones con los que tendrían que ser nuestros verdaderos socios (Estados Unidos, Israel, Francia, Gran Bretaña, Japón, Italia o Alemania). Mientras tanto, a ponernos en manos de la divinidad, que alumbre a Moratinos para que no siga por la vía del ridículo y del desdoro.
2 comentarios
Máximo Medina -
P.D.: Tanto a Juan Velarde como a la invitada Beatriz Ruipérez, España ya mantiene relaciones con Israel, que sean fluidas o tensas depende del momento o del día y de las acciones de uno y otro. En este aspecto creo que debemos relacionarnos con todo el mundo, pero como es obvio y normal con unos más que con otros.
Beatriz Ruipérez -
2. ¿Tilda de criminal a Kagame y plantea que España se debe relacionar con Israel? El Estado israelí es un modelo a seguir, claro, solo asesina diariamente a decenas de palestinos, ataca a barcos de ayuda humanitaria y bloquea, "para seguridad de los israelitas", a los pueblos muslmanes colindantes.
3. Era lo que faltaba por leer...