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Desde mi escaño

Paquirrín: la nadería mediática por excelencia

Paquirrín: la nadería mediática por excelencia

Dicen, no sin falta de razón, que la imaginación y la creatividad se ha alejado de la televisión, que en líneas generales ya nadie arriesga un euro por formatos de entretenimiento para toda la familia. La fórmula por la que las cadenas suelen apostar es por ese tipo de programas insulsos, superficiales, con escaso contenido informativo y sí, en cambio, muchas dosis de visceralidad y donde, a poco que te despistes, acabas presenciando unas raciones importantes de casquería de la peor calaña. El problema es que esos espacios acaban teniendo un share importante, aunque está por ver si es porque la audiencia los reclama o porque, a falta de pan, buenas son tortas.

Y una torta bien grasienta y que contribuyó a acrecentar el colesterol mental de los espectadores fue el documental con el que Telecinco nos obsequió hace tan solo unos días, un recordatorio de la vida de Kiko Rivera, popularmente llamado Paquirrín y conocido por ser hijo de una de las cantantes de mayor fama de este país, Isabel Pantoja. Por méritos propios, Paquirrín habría sido un verdadero despojo, alguien al que conseguir las cosas por sí mismo le hubiese costado no sólo Dios y ayuda en esta vida, sino también en las siguientes.

Estamos hablando de una persona a la que todo aquello donde no podía influir la madre estaba condenado al fracaso, como su intento, por ejemplo, de entrar a jugar en las categorías inferiores del Real Madrid. Ya puedes ser el hijo de…que como no haya talento y sí mucho estómago sobredimensionado, no hay nada que hacer. Sin embargo, viendo que para conseguir metas en esta vida había que esforzarse, decidió que había que tirar de apellido materno y lanzarse al ruedo del show-business mediático con continuas apariciones en platós, posados en revistas, actuaciones como DJ o bien estando en candelero con un sinfín de ¿novias? aprovechateguis que sólo veían en el Rivera Pantoja un trampolín a la (efímera) fama.

En definitiva, Kiko Rivera Pantoja, Paquirrín o el hijo de Isabel Pantoja no es más que un producto que está ahí por ser familia de quien es, pero que se iguala a otra nadería de la naturaleza como Belén Esteban, famosa por arrimarse al torero Jesulín de Ubrique. Eso sí, a neuronas andan más o menos empatados.

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