Ignorancia y atrevimiento, ni juntos ni revueltos
La ignorancia y el atrevimiento son cuestiones muy peligrosas en esta vida cuando decides juntarlas. Es algo así como la cerilla prendida y la lata de gasolina. Por sí solas, no pasa nada, no hay problema. Sin embargo, si alguien decide introducir el fósforo encendido en el interior del bidón, la hemos liado y se provoca un incendio muy complicado de extinguir. En sí, refiriéndome a la persona, el hecho de ser ignorante no connota nada singular ni extraordinario. Conozco a gente que Dios o las circunstancias no les ha permitido poder evolucionar intelectualmente, pero son personas maravillosas que, a pesar de su falta de culturilla general, tienen el don de la prudencia, del saber estar, de saber cuando hay que retirarse, cuando se está de más. En cambio, los peligrosos son los atrevidos y si encima de ese atrevimiento le ponemos unas gotas de ignorancia, ¡para qué queremos más!
Y fruto de ese ignorante atrevimiento pasó lo que pasó con la retransmisión del España-Chile en Telecinco. El amigo Paco González metió la pata hasta el corvejón, tal y como refleja mi compañero de Periodista Digital Paul Monzón. Muchos le han criticado por cebarse en un detalle que entienden nimio (seguramente esos mismos que entonces se pusieron como motos cuando el famoso ce, ce, o, o, de Alfredo Urdaci), pero para muchas personas y para mí, sinceramente, fue un ridículo y una vergüenza sin precedentes.
Esta fue la película de los hechos: “Minuto 33:27 del primer tiempo del España-Chile del Mundial de Sudáfrica. Tras un saque de esquina servido por Xavi, Piqué salta, cabecea y echa el balón por encima del larguero. Hasta ahí todo normal. España iba ganando tras el magistral gol de Villa. Inmediatamente, Paco González, narrador del partido en Telecinco, comenta la ventaja en el juego aéreo de España y resalta la talla alta de los jugadores. Inmediatamente, añade:
"Somos más altos (que los chilenos), bastante más altos que la selección chilena" "¡Estamos mejor alimentados!".
Las ligerezas de los comentaristas y su falta de tino (quizá pedantería) para referirse o calificar a un contrario ya le ha jugado una mala pasada a Manolo Lama de Cuatro, quien horas antes del trascendental partido que el Atlético de Madrid disputara en la final por la Europa League, tuvo la nefasta ocurrencia de humillar a un mendigo en una conexión en directo”.
¿Es o no es deplorable que un periodista se exprese en esos términos? Luego nos quejaremos cuando vayamos de turistas a Chile, a Argentina, a Uruguay, a México o a Colombia que nos traten con cierto desprecio. La verdad es que al señor González no sólo le está haciendo falta una sesión de nevera, sino darse una vuelta por Chile y que vea la maravilla de país que es. Y su gastronomía, nada que envidiar a la española. Se lo digo yo, que tuve la fortuna de estar de vacaciones en tan linda nación.
2 comentarios
Máximo Medina -
Al sr. Anónimo me gustaría decirle que a Paco González y a cualquier otro se le puede criticar, ya sea porque ha metido la pata o porque ha acertado de pleno. Criticar no es sólo meterse con alguien, sino también felicitarle cuando el comentario es positivo.
Anónimo -
Es de muy mal gusto criticar a Paco González por un comentario inofensivo y defender a empresas que tienen de la desfachatez de llamarse medios de comunicación que en su edición impresa poseen una sección llamada el tonto del día, o algo así, porque no me interesa ni como papel higiénico, y que en su programación televisiva han injuriado gravemente a políticas y comunicadoras de otras cadenas insinuando o declarando abiertamente que se dedican a la prostitución.
Demagogia no, hipocresía tampoco. Menos chorradas, que en estos días se han proferido cosas mucho más graves e hiriantes y han pasado desapercibidas (véase Durán i Lleida, Rajoy, etc.)