Ana Blanco al TD-2, la acertada apuesta de Julio Somoano
Julio Somoano ha dado un golpe de autoridad. Como director de informativos de Televisión Española ha visto con honda preocupación que el telediario de las 9 de la noche, el que marca tendencia e influencia tradicionalmente, estaba de capa caída. Marta Jaumandreu, apuesta para esta temporada, se vio pronto superada, excesivamente nerviosa en sus inicios y con poca empatía para comunicar a la cámara. Ya se buscó una solución de emergencia trayendo a Marcos López desde el fin de semana para que estuviese de lunes a viernes. Pero ni con esas. La sentencia de la audiencia era clara y firme, Jaumandreu no estaba dando el resultado esperado.
Por eso, de cara a la temporada nueva, Somoano ha optado por hacer una jugada maestra, que es mover a Ana Blanco del informativo del mediodía al de la noche. Blanco es ese rostro que todo el mundo reconoce con la casa, es una institución dentro del ente y además se ha mantenido siempre como cara de las noticias desde los gobiernos de González, Aznar y Zapatero hasta la presente legislatura. Es la clásica periodista que ofrece confianza, credibilidad y seguridad a la audiencia.
Es evidente que las privadas, con más de 20 años en antena, han ido dándose cuenta de la necesidad de tener un buen informativo para, al mismo tiempo, enganchar a la audiencia a sus programas posteriores. Inicialmente, aprovechando un buen caudal de dinero, fichaban a golpe de talonario a las mejores estrellas de TVE, pero luego éstas se quedaban poco menos que en paños menores ante las carencias de recursos técnicos. Para ponerles un ejemplo sencillo, es como si mañana el Numancia de Soria ficha a Cristiano Ronaldo. Será la estrella del equipo, claro está, pero en modo alguno podrá hacer mucho más para que el modesto cuadro castellano gane la Liga. Eso lo han aprendido perfectamente los canales privados que han ido dotándose de una excelente infraestructura de cara a los informativos.
Por eso, la estrategia pensada por Julio Somoano le puede dar mucho juego a TVE de cara a recuperar parte de la audiencia del Telediario 2, que es el verdadero buque insignia de la casa y que, hasta no hace mucho, dominaba sin problemas la parrilla de la televisión pública. Por lo menos parece que estamos ante un equipo directivo en RTVE que parece preocuparse por la cadena y que tiene ideas para hacer una televisión pública de calidad en tiempos de máxima austeridad. Esperemos que su trabajo siga en esta línea.
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