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Desde mi escaño

Juventudes Socialistas, Domenech y la doble vara de medir

Juventudes Socialistas, Domenech y la doble vara de medir

Vamos hoy con una ración de doble moral. Se quejan amargamente los miembros de Juventudes Socialistas en Tenerife que el rector de la Universidad de La Laguna, Eduardo Domenech, sea quien haya presentado en un acto en el Casino capitalino a José Manuel Bermúdez, candidato de Coalición Canaria al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.

Vamos a ponernos en el supuesto de que tienen razón los socialistas. Es más, les voy a dar la razón y me parece muy justa su protesta porque dicen que la institución universitaria debe estar al margen de cualquier connotación política, que la Universidad es un centro del saber y no de la propaganda y del panfletismo. Insisto, les compro a los jóvenes del PSOE su protesta y me pongo en primer línea de la pancarta para protestar enérgicamente por el hecho de que Domenech se alinee al lado de un determinado partido, en este caso Coalición Canaria.

Sin embargo, ¡qué mala es la hemeroteca!, a las Juventudes Socialistas les tenía que haber dicho que el que fuera rector de la Universidad Complutense, en Madrid, Carlos Berzosa, fue uno de los que significó en la famosa Plataforma de Apoyo a Zapatero y no hay más que darse una vuelta por cualquiera de sus campus para darse cuenta del auténtico sesgo político que existe en esta universidad con escraches a gente que no eran de la cuerda de Berzosa como Rosa Díez, con Pablo Iglesias a la cabeza y que encima eran definidos como actos de democracia en estado puro. En fin, vivir para ver.

De hecho, si alguien ha sido un experto el politizar la vida universitaria ha sido este grupete de izquierdas, antes del PSOE y ahora de Podemos y sus asociados. De milagro, en determinadas ocasiones, no han convertido los claustros en auténticas checas de auténtico milagro. Así que ahora, aunque tengan razón en protestar por los colores políticos que pueda tener el rector lagunero, mejor harían en guardar un poquito de silencio.

Repito que no estoy de acuerdo en que Domenech se signifique siendo rector de una institución del calado de la Universidad de La Laguna, que su papel primordial debe ser, precisamente, el estar exigiendo a la clase política más fondos para mejorar infraestructuras e invertir en investigación. También sería deseable que el poder político estuviese fuera del ámbito universitario, ya que muchas veces conlleva la pérdida de independencia real de quienes tienen que tomar decisiones.

Sin embargo, a los cachorros del puño y la rosa decirles que lo que tanto cacarean en Tenerife, que se hubiesen aplicado el cuento en Madrid y en otras universidades públicas donde, en ocasiones, más que un centro del saber, lo que parece es un auténtico festival del comisariado comunista y al que no pase por el aro, escrache que te crió.

Artículo publicado originalmente en ABC Canarias

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