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Desde mi escaño

María Montero: dos ovarios periodísticos bien puestos

María Montero: dos ovarios periodísticos bien puestos

Con dos ovarios bien puestos. Esa es la mejor definición que le va a la periodista María Montero, una mujer todoterreno que, haciendo un juego de palabras con su apellido, se pone el mundo por montera. Nada ni nadie la detienen en su faceta como una reportera comprometida a tope con los más necesitados. Basta con meterse en su perfil de Facebook para constatar que no suelta la presa una vez agarrada. Es capaz de movilizar a las fuerzas vivas de Santa Cruz de Tenerife o del municipio que sea para contrarrestar y solventar cualquier injusticia que se esté cometiendo.

Lo bueno que tiene María es que es una persona que cuenta con una vitalidad impresionante, alguien que está desde primeras horas del día, antes incluso de que los primeros rayos de sol la acaricien la cara, buscando la noticia, yendo de un lado para otro. Igual te la puedes encontrar en un pleno del Ayuntamiento santacrucero que en el Parlamento interesándose por una moción por la que ha luchado para que algún partido la lleve a pleno o a comisión, como que te la encuentras con una familia en riesgo de exclusión o yendo por las sinuosas carreteras del Macizo de Anaga rastreando la actualidad. Es una sabueso de la noticia y doy perfecta fe de ello.

Y cuando no está detrás de la noticia sobre el terreno, ahí está con el micrófono delante para contar y cantar las cosas como son en su nueva casa, Gente Radio, con el programa ‘Tiempo de Mujeres’ donde diariamente hace un espacio en el que la actualidad local, regional y nacional queda perfectamente resumida bajo su particular prisma y con una nómina de colaboradores que ponen un sello diferente a la radio tinerfeña.

No voy a decir que María Montero sea como los miembros del mítico Equipo A, porque ella va sola, pero desde luego si cualquiera tiene un problema y uno tiene la oportunidad de encontrársela y contárselo, que nadie duda que ella luchará a brazo partido para que una injusticia no quede enterrada entre el marasmo de intereses mediáticos y políticos que existen en Tenerife. No es de extrañar que muchos políticos prefieran tenerla de amiga porque María, de buenas, es un amor, pero como alguien se le ponga enfrente…¡que vaya temblando! Esta periodista no se calla así venga otro Delta a Tenerife. ¡Palabra!

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