'Sálvame Deluxe' ya no lo resucita ni Jorge Javier Vázquez

Se acabó lo que se daba con el ‘Sálvame Deluxe’. El programa de picar carne humana, entrañas incluidas, de Telecinco toca a su fin porque todos los formatos, por muy exitosos que hayan sido, tienen una vida útil limitada y el espacio de Jorge JavierVázquez no iba a ser una excepción a la regla. Sus dramas, sus montajes y sus broncas en directo ya no enganchan a una audiencia que se ha hartado del mal rollismo de los viernes por la noche y han apostado por algo más cómodo y relajado como escuchar a una serie de famosos transformados en grandes artistas del panorama internacional de ayer y de hoy.

Los datos están más que claros, por mucho que el señor presidente de Mediaset en España, el señor Vasile, se empeñe en querer hacer de Jorge Javier Vázquez la bandera de todos sus proyectos mediáticos. Que no, Paolo, que esto no funciona así. Que no es posible tener tal atracón de Jorge Javier Vázquez porque al final lo que se provoca, precisamente, es un empacho entre la audiencia. A todos nos puede encantar, por ejemplo, el Villagodio a la piedra, pero si nos lo ponen al desayuno, al almuerzo, a la merienda y a la cena acabaremos estragados.

Y eso es lo que ha pasado con Vázquez, que al final era el presentador fetiche y que valía para un Sálvame, para Hay una cosa que te quiero decir, para unos Supervivientes, un Gran Hermano y para los especiales que salieran del magín de los programadores de la cadena de Fuencarral.

Aparte, por supuesto, que el modelo del Sálvame Deluxe ya no cautivaba a la audiencia porque se había convertido en el mismo mecanismo de siempre, estirar el chicle de la polémica de la semana sin aportar tampoco más datos que realmente dieran para sostener el tema cuatro horas largas. Fíjense ustedes que con el ‘affaire’ de Don Juan Carlos I y Bárbara Rey el programa parecía tener material potente, pero el público, soberano donde lo haya, ha dicho basta. Ya no quiere que le den gato por liebre y hasta algo tan grave como las correrías a talonazo público del hoy monarca emérito ya no enganchan, al menos contada por la tribu del cortijo de Telecinco.